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Estoy a sus órdenes (parte 1)

Publié par : eloetjames le 01/03/2024

¡Estoy a sus órdenes! El hombre que descubre sus deseos de sumisión... Un deseo de dejarse llevar por el deseo de ser dominado. "Me gusta cuando tomas mi pene y lo aprietas entre tus manos. Tus palmadas en mis testículos, este deseo de pertenecerte para dejarme hacerlo. Me gusta mucho este sentimiento de ser tuyo mi amor, mi amante, y como tú Me pidió que la llamara: señora."Ella decide dar un paso, pasar de nivel - Ella: eres mía, cuando te doy una orden haces lo que te digo, ¿entiendes?- Yo: si señora Ella sale de la habitación y regresa 2 minutos después. -Ella con orgullo: ¡ahora eres mi puta!- Yo: Sí señora. Estoy desnudo, con las manos esposadas a la espalda. Una capucha que me impide ver a mi alrededor con sólo respirar. Me quedo de pie, esperando sus órdenes, ella me habla con voz autoritaria y me ordena que me arrodille; Yo obedezco.Pero no voy lo suficientemente rápido para ella, entonces recibo una linda y merecida palmada en las nalgas, con voz seca, mi ama me ordena: eres mi puta, no te atrevas a olvidarlo.Resultado: me arde la nalga y trato de aliviar el hormigueo con la mano, pero recibo otro golpe en el pene, que ella se había encargado de quitar.El dolor es extremadamente fuerte.- Ella: No lo repetiré, eres mía y tengo todo el poder sobre ti mi puta. Me doy unos quince golpes con el látigo por todo el cuerpo. Nalgas, sexo, pezones... Ella siente un gran placer en humillarme. Quiero decirle que pare, pero eso no es posible, será aún más dominante.Luego, un silencio.La oigo moverse por la habitación con sus tacones, hace ruido, oigo su respiración cada vez más cerca.Decide atarme los testículos con una cuerda o una banda elástica, no noto la diferencia. Está apretado, no digo una palabra, tarda un poco.Luego pasa a mis pezones, creo sentir una pinza de ropa y tengo la impresión de sentir las mismas sensaciones que ella ya me había hecho probar. Rápidamente me los puso. Por un rato me hace hervir a fuego lento, sabe que voy a gemir de dolor, solo está esperando eso. No puedo aguantar más.-Ella… ¡cállate perra! Me desata los brazos, los cuales relajo a lo largo de mi cuerpo, pero eso no le conviene, me dice que los mantenga detrás de mi espalda y que me quede derecho por un momento.- Yo: Pido disculpas y respondo “sí señora”.- Ella: acuéstate boca arriba, ve más rápido perra y abre las piernas, más rápido!!! Ahora, con las manos detrás de la cabeza, ella se enoja, yo le devuelvo el látigo, con más violencia que la primera vez, gimo, gimo, pero ella continúa.Los golpes llueven por todo mi cuerpo, incluso mis testículos.No sé cuánto dura... Y de repente nada.Mi respiración es pesada, luego me calmo.- Ella: ¿entiendes ahora quién está a cargo de ti, perra?- Yo... sí señora - Ella, en tono seco: ¡levántese!- Yo: si señora. Me ata las manos a la espalda y regresa a buscar algunas cosas de la mesa o al menos eso creo. Todavía tengo la capucha ciega puesta, mi ama vuelve a acariciar mis nalgas enrojecidas por su pasión.- Ella: vas a ganar mucho dinero, puta mía.Luego continúa las caricias y me pregunta: ¿no escuché nada, puta?- Yo... sí señora, gracias señora. Su voz se vuelve más suave, con ...

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Palabras clave : En partie vraie, Bisexuel, Première fois, Soumission/domination